La saga de películas de Star Wars, desde su estreno a mediados de los setenta, ha sido una de las franquicias más fructíferas de la cultura popular contemporánea.
Por: Jorge Rojas
Y cuando pensábamos que todo estaba dicho en cuanto a los títulos canónicos de la saga, con dos trilogías a cuestas, nos encontramos a la espera del estreno de la primera entrega de una nueva trilogía: Episodio VII, El Despertar de la Fuerza.
Desde el punto de vista del marketing, lo de Star Wars es un caso de éxito del merchandising. Para darnos una idea, las dos primeras trilogías recaudaron en taquilla poco más de US$4,000 millones en la taquilla, mientras que la primera línea de figuras de acción, producidas por Kenner entre los años 1978 a 1985, recaudó por sí sola US$3,800 millones, y la reedición lanzada por Hasbro en 1995, ha recaudado otros US$5,500 millones en ventas.
Aunque las cifras sean impresionantes, estas palidecen frente a las proyecciones frente al estreno de la nueva película de la saga que, para muchos entendidos, está destinada a hacer historia.
Como lo demuestra el caso de la franquicia de Star Wars, el entretenimiento es un negocio que debe ser tomado en serio.
Fuentes:
Disney presenta el merchandising de Star Wars: El despertar de la Fuerza
La fuerza más poderosa del universo de la Guerra de las Galaxias está en sus juguetes