¿Qué tan joven debes ser para ser empresario? ¿Debes esperar a sentirte maduro? ¿Preparado? ¿Seguro? ¿Con la idea perfecta? Nunca se es demasiado joven para ser un empresario.
Por: Yessica Centty
Existen varios empresarios jóvenes en el presente, empresarios millonarios que empezaron su fortuna con un “sueño”. Hoy compartimos 4 casos:
Henry Patterson: Empresario más joven de Gran Bretaña. Ha puesto en marcha su tercera empresa a la edad de nueve años. Henry Patterson comenzó su primera empresa cuando tenía sólo siete años y empezó a vender bolsas de abonos para 1 £. (3.5 soles). Al ver el éxito de su negocio, creo su propia tienda eBay donde vendía artículos que había comprado en tiendas de caridad. Ahora Henry ha emprendido una tienda de dulces en línea para niños llamado “No antes del té”.
Mark Zuckerberg: A los 20 años creó Facebook, la red social más grande del mundo. Se ubica como el tercer joven más millonario del mundo. La publicación estableció que con 26 años, el estadounidense cuenta con una fortuna de 13 mil 500 millones de dólares conseguidos gracias a su creación en Internet.
Larry Page: En 1998, a los 23 años creó la página web Google junto a Sergey Brin. Es uno de los hombres más ricos del mundo. Se estima que tiene un patrimonio neto de 23.7 mil millones de dólares (2014). Actualmente se desempeña como CEO de la compañía Alphabet, una giga empresa que engloba a Google y otras empresas de su ámbito.
Yoshikazu Tanaka: En el 2003, con la edad de 26 años, comenzó a desarrollar SNS GREE como una afición. En febrero de 2004 la abrió al público como un sitio web personal. Hoy en día, es una red social en Japón. Su fortuna supera los dos mil 200 millones de dólares, estimados por Forbes.
Por ahora, lo que te recomendamos es que escribas las ideas en un cuaderno, todas las ideas que generes. La mente a veces nos hace “jugadas” de amnesia. Es por esto que es aconsejable apuntar las ideas en un cuaderno o en tu celular. Existen personas que tienen cuadernos con sus ideas (arquitectos, empresarios, artistas, etc.) que citan que de no documentar sus ideas, quizás no existirían sus negocios al presente. Aunque te parezca “fuera de lo ordinario”, escríbela. Con el tiempo, los avances tecnológicos se darán y se podrá crear “esa idea loca”. Como decía Walt Disney: “Si puedes soñarlo, puedes hacerlo”. Pide retroalimentación de tus ideas. Dos “cabezas” piensan mejor que una.
Y tú: ¿Tienes algunos cuadernos donde apuntar tus ideas?